No me grites.
Te respeto menos cuando lo haces. Y me
enseñas a gritar a mí también y yo no quiero hacerlo.
Trátame con amabilidad y
cordialidad igual que a tus amigos.
Que seamos familia, no significa que no
podamos ser amigos.
Si hago algo malo, no me preguntes
por qué lo hice.
A veces, ni yo mismo lo sé.
No digas mentiras delante de mí, ni
me pidas que las diga por ti (aunque sea
para sacarte de un apuro).
Haces que pierda la fe en lo que dices y me siento mal.
Cuando te equivoques en algo,
admítelo.
Mejorará mi opinión de ti y me enseñarás a
admitir también mis errores.
No me compares con nadie,
especialmente con mis hermanos.
Si me haces parecer mejor que los demás,
alguien va a sufrir (y si me haces parecer peor,
seré yo quién sufra).
Déjame valerme por mí mismo.
Si tú lo haces todo por mí, yo no podré aprender.
No me des siempre órdenes.
Si en vez de ordenarme hacer algo, me lo
pidieras, lo haría más rápido y más a gusto.
No cambies de opinión tan a menudo
sobre lo que debo hacer.
Decide y mantén esa posición.
Cumple las promesas, buenas o malas.
Si me prometes un premio, dámelo, pero
también si es un castigo.
Trata de comprenderme y ayudarme.
Cuando te cuente un problema no me digas:
"eso no tiene importancia..." porque para mí sí la tiene.
No me digas que haga algo que tú no haces.
Yo aprenderé y haré siempre lo que tú hagas,
aunque no me lo digas. Pero nunca haré lo que
tú digas y no hagas.
No me des todo lo que te pido.
A veces, sólo pido para ver cuánto puedo recibir.
Quiéreme y dímelo
A mí me gusta oírtelo decir, aunque tú no creas
necesario decírmelo.
lunes, 12 de enero de 2009
Carta de un hijo a sus padres
Canción Don Federico
que ya no nos acordábamos de la letra.
¿Os acordaís de los gestos?
Don Federico
Don Federico perdió su cartera,
para casarse con una costurera,
la costurera perdió su dedal,
para casarse con un general.
El general perdió su espada,
para casarse con una bella dama,
la bella dama perdió su abanico,
para casarse con Don Federico.
Don Federico perdió su ojo,
para casarse con un piojo,
el piojo perdió su pata,
para casarse con una garrapata,
la garrapata perdió su cola,
para casarse con una pepsi-cola,
la pepsi-cola perdió sus burbujas ,
para casarse con una mala bruja.
La mala bruja perdió su gatito
para casarse con Don Federico,
Don Federico le dijo que no
y la mala bruja le echó una maldición,
al día siguiente le dijo que sí
y la mala bruja se echó a reír, jajaja.
Caretas de los Lunnis
Villancicos
cantaron los Lunnis.
Esperamos que disfruteis con ellos.
Arre borriquito
En la puerta de mi casa
voy a poner un petardo,
"pa" reírme del que venga,
a pedir el aguinaldo.
Pues si voy a dar a todo,
el que pide en noche buena,
yo si que voy a tener,
que pedir de puerta en puerta.
Arre borriquito, arre burro arre,
anda más deprisa que llegamos tarde.
Arre borriquito vamos a Belén,
que mañana es fiesta
y al otro también.
Campana sobre campana
Campana sobre campana,
y sobre campana una,
asómate a la ventana,
verás al Niño en la cuna.
Belén, campanas de Belén,
que los ángeles tocan
¿qué nueva me traéis?
Recogido tu rebaño
¿a dónde vas pastorcillo?
Voy a llevar al portal
requesón, manteca y vino.
Belén, campanas de Belén,
que los ángeles tocan
¿qué nueva me traéis?
Ande, ande, ande, la marimorena
ande, ande, ande que es la Nochebuena.
En el portal de Belén hay estrellas, sol y luna
la Virgen y San José
y el Niño que está en la cuna.
Ande, ande, ande, la marimorena
ande, ande, ande que es la Nochebuena.
Los pastores que supieron que el Niño quería fiesta,
hubo pastor que rompió tres pares de castañuelas.
Ande, ande, ande, la marimorena
ande, ande, ande que es la Nochebuena.